La evidencia es contundente. Las instituciones del sistema de salud colombiano deben cambiar para constituirse en medios idóneos para la implementación de los propósitos del Plan Decenal de Salud Pública. Sin embargo, debe tenerse en cuenta que los cambios necesarios no corresponden tanto a las estructuras físicas, sino que éstas están llamadas a alojar con suficiencia los modelos rediseñados con enfoque de valor hacia el ciudadano.
Se ha avanzado mucho, pero también es mucho lo que falta, especialmente en términos de cultura organizacional, competencia para la gestión clínica, transparencia y verdadera generación de valor público.
En esta oportunidad comparto dos interesantes documentos para análisis y reflexión, sin que exista la posibilidad de descalificación por contexto. Vendrán después comentarios sobre el particular.